La caída de las apariencias

 




Como indique en el post anterior esta es la época de la caída de las apariencias y las estructuras sobre las cuales basamos nuestra forma de vida.

Como este cambio de vibración es de la galaxia afectará a todo el planeta y sus sistemas y por lo tanto, todos y cada uno de los países entraran en el túnel de oscuridad para hacer sus cambios con la duración e intensidad que le corresponda según el nivel de vibración de su población. Venezuela entró de primero en diciembre de 1999 y ha durado 20 años con un nivel de intensidad alto. EEUU ha sido el segundo en entrar y lo hizo el 3 de noviembre de 2020.

Para hablar de las caídas de las estructuras voy a enfocarlo en aspectos de percepción que se asocian a países y como esa “casa” (metáfora para el país) se está desmoronando.

Veamos a Venezuela, recuerdo en el 2002 en una reunión de gerencia con americanos e ingleses sobre perspectivas económicas. En esa reunión el expositor hablaba de la percepción del venezolano con respecto a Venezuela y resaltaba que este creía con firmeza que Venezuela era el país más rico del mundo y que tenía el mejor ejercito del mundo. Por supuesto los americanos soltaron una carcajada por esto último y con toda la razón.

Pero en el 2010 la talla promedio de los cuadros altos y medios de nuestras fuerzas armas era grande y hoy somos un país con 80% de pobreza crítica, con un salario mínimo menor que 1$ y con un parte importante de la población muriendo literalmente de hambre. Es decir, esa percepción no solo era errada, sino que se fracturó y la casa se vino abajo.

Demos un paseo por EEUU, con todo el respeto a ese proceso que corresponde a un país que no es el mío, pero me está enseñado mucho al observarlo.

Cuando le preguntamos a las personas que perciben de EEUU generalmente contestan: es el país de la libertad, su sistema judicial es sólido y confiable y es la democracia más estable del mundo.

Durante el 2020 y con un despliegue simbólico muy impactante hace 2 días se resquebrajaron los cimientos de esa democracia y nos guste o no arrastra al resto del planeta. Yo he observado las grietas de esta forma:

La Libertad: EEUU es un país de controles acérrimos de todo tipo, pero lo que realmente caracteriza a ese país es la libertad de expresión. Esa libertad ha sido pisoteada, por decir lo menos, durante todo el 2020 por el bien común. Como testigo he visto como Twitter censuró al presidente de EEUU en febrero de 2020, todas las redes han censurado a los ciudadanos de a pie (esto es a nivel mundial) si en sus escritos aparece la letra q, teorías conspirativas, algo diferente al discurso oficial del covid-19, las palabras fraude electoral y lo último fue cerrarle las cuentas al presidente de los EEUU hasta el 20 de enero de 2021. Como los medios masivos manejan un solo discurso, muestran solo lo que quieren y no muestran algunos hechos haciendo parecer que no existen o son inventos. Se rompió la libertad de expresión en el planeta, pero en EEUU esa es su gran bandera y ha sido peor.

Sistema judicial: cuando un presidente de una nación dice que hubo fraude en la elección, lo mínimo que esperaría es que los tribunales lo vean y sentencien un dictamen al país con una decisión clara que no de pie a ninguna duda. Está en juego una de las premisas más sagradas de la democracia que es la transparencia en la votación. Hemos visto demoras, poco análisis y destiempo. El Tribunal Supremo de Justicia desestima la demanda de Texas por forma y no fondo y la demanda más grande la oye el 23 de enero de 2021, 3 días después de la toma de posesión. No me mal entiendan, este proceso es planetario, cualquier candidato que gane llevará a EEUU al mismo resultado: un desmoronamiento de las estructuras que sostienen su forma de vida, hay que cambiar. Mi punto es que en un momento donde una parte importante de la población pidió una respuesta a un asunto vital, el sistema se lave las manos y rueden la ruga.

La democracia más sólida del planeta: tomemos una respiración profunda. Sino hay libertad, sino hay un sistema electoral transparente a toda prueba y las cortes se hacen los desentendidos me hago la pregunta. ¿Es una democracia solida? Y me la hago especialmente como venezolana muy sensible al tema. Y, como para que no nos quede ninguna duda de las rajas en la estructura el 6 de enero de 2021 en la sesión para votar por el presidente, los congresistas que públicamente y por escrito dijeron que iban a vetar la votación se echaron todos para atrás luego del asalto al Congreso.

Esto muestra que el sistema adentro está lleno de termitas y ya su polvo no se puede ocultar barriendo todos los días. No hay vuelta atrás, pase lo que pase de ahora en adelante la estructura se fracturó.

Les invito a mirar ahora el país donde viven, donde nacieron, de donde son sus ancestros y revisen las percepciones y tendrás una idea de por donde se empezarán a resquebrajar las estructuras y a caer las apariencias.

Ojo, estas son buenas noticias, las casas están llenas de termitas y están podridas. Se están desmoronando por dentro y nosotros seguimos haciendo vida en ellas, a veces dormidos y ajenos a eso, otras haciéndonos la vista gorda como si no estuviese pasando y otras pescando en rio revuelto. Observemos para tener el alerta alto y poder salir antes y no caigamos con la casa.

¿Porqué son buenas noticias? Porque lo que no sirve en esta nueva vibración se va a ir, ya no funciona, en muchos casos desde hace mucho tiempo, pero la resistencia de una masa cómoda dentro de su realidad, aunque sea terrible, dormida y manipulada no permite que fluya con los cambios y eso nos pasa a todos y les conviene a muchos.

El imperio que se está cayendo es el de la apariencia, vamos a tener que ser nosotros mismos y para eso primero hay que encontrarse y como no se puede sanar lo que no se ve, hay que encontrar lo que no nos sirve para hacer los cambios. Estos cambios son evolutivos y serán para bien del planeta y todo lo que esté en ella.

Termino con una reflexión de un amigo en su divorció y me lo describió de esta manera: mi matrimonio era como un jarrón de barro, al principio lo cuidamos, pero en algún momento lo descuidamos y se nos rompió. Tratamos de pegar las piezas y vivir con el hasta que nos dimos cuenta que era un jarrón roto y pegado del cual se salía el agua por todos lados hasta que entendimos que la única forma era volverlo barro otra vez y hacer otro jarrón nuevo que, por supuesto será diferente y nunca, nunca sería igual, así como nuestra relación nunca sería igual y entonces logramos tomar la decisión correcta para ambos.

Rosana Gutiérrez








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